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martes, 18 de septiembre de 2012

La farsa de los nacionalistas separatistas.

El germen de la reivindicación secesionista catalana hay que buscarlo en la debilidad de los últimos años de reinado de Felipe IV , allá por el año 1.640, debilidad que quiso ser aprovechada por el rey francés Luis XIII para anexionarse algunos territorios cercanos como Cataluña. A fin de protegerse de dicha ofensiva, se mandaron los ejércitos reales a aquellas tierras exigiendo a sus habitantes una aportación pecuniaria para la causa , lo que derivó en un violento recibimiento a las tropas por parte de la minoría catalana secesionista que incrementó su radicalización; sin embargo acabarían más adelante plegándose al rey de España vista la actitud hostil de los franceses hacia ellos. Muy resumido , pero ahí descansa el fundamento separatista de esta gente; bueno , y también en las concesiones hechas durante los últimos 30 años que culminaron en el Estatuto Catalán Vrs ZP . Cataluña nunca fue una nación, ni un país, ni siquiera uno de los reinos históricos pues se integraron dentro de la corona de Aragón. Y el hecho de reconocerles en la Constitución a ellos y a los vascos sus fueros históricos (estatutos jurídicos aplicables a una determinada localidad otorgados por el rey) fue la espita que encendió la mecha de esta farsa que ha desembocado en las Autonomías actuales y algunos separatismos.. Pero que no nos confundan.

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